Crónica de archivo.
28.11.2010
Crónica rescatada de hace un par de años cuando fuímos a Córdoba.
Hola a todos, ya estoy de vuelta de Córdoba. A pesar del día de perros que tuvimos el sábado en el que no paró de llover en todo el día, el domingo amaneció con el cielo despejado y con un sol radiante. Suerte que tuvimos, porque hoy vuelve a llover.
Como no habíamos viajado el día anterior nos tocó madrugar, así pues, cuando el despertador tocó a las 6 comenzó la mañana para nosotros. Desayuno, últimos preparativos y al encuentro con los amigos que habíamos quedado. A eso de las 8:45 llegamos a Córdoba después de un viaje tranquilo y, apenas, sin tráfico (se ve que a esa hora el mundo está todavía durmiendo). Córdoba nos recibía con el sol fuera y todos deseábamos que comenzara a calentar porque frío sí que hizo. Una vez que nos juntamos con el resto de compañeros que sí habían viajado el día anterior nos metimos en el vestuario para prepararnos parala carrera.
La Media Maratón
de Córdoba está muy bien organizada. Allí nos congregamos más de 3.000 atletas para participar en la prueba (3.353 inscritos), así que, os podéis imaginar la cantidad de gente que había allí pasando frío. La gente calentaba buscando el sol, las calles de los alrededores con sol estaban llenas de atletas y las calles con sombra vacías.Como no habíamos viajado el día anterior nos tocó madrugar, así pues, cuando el despertador tocó a las 6 comenzó la mañana para nosotros. Desayuno, últimos preparativos y al encuentro con los amigos que habíamos quedado. A eso de las 8:45 llegamos a Córdoba después de un viaje tranquilo y, apenas, sin tráfico (se ve que a esa hora el mundo está todavía durmiendo). Córdoba nos recibía con el sol fuera y todos deseábamos que comenzara a calentar porque frío sí que hizo. Una vez que nos juntamos con el resto de compañeros que sí habían viajado el día anterior nos metimos en el vestuario para prepararnos para
La Media Maratón
La carrera se desarrolló bastante bien. Al principio no puedes correr bien porque hay mucha gente y cuesta coger el ritmo pero tras el 2º kilómetro ya pudimos hacernos un hueco y comenzó nuestra carrera. Yo iba acompañado por Agustín, mi compañero de batallas, que no se encontraba bien de piernas y, en la segunda parte de la carrera, tuve que ir animándolo y tirando un poquitín de él para que no se me quedara atrás. Al final nos dimos por satisfechos llegando a meta en 1h47'30" (5'06"/km) que ha sido una de nuestra mejores marcas en las medias que llevamos.
Después de un tiempo de descanso e intercambio de sensaciones nos fuimos a la ducha y aprovechamos el magnífico día que se había presentado para irnos al centro de Córdoba a comer.
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